A 'Sale el Sol' le cayó la noche por anunciar el caso de un asesino serial de mujeres en CDMX de forma festiva

Critican a presentadores de Sale el Sol por presentar caso de feminicida de forma festiva. Foto: Captura de video YouTube vía Imagen Entretenimiento

Sin saberlo, les cayó la noche. El programa matutino Sale el Sol, que se transmite por Imagen Televisión, ha generado polémica por la forma festiva en la que sus conductores anunciaron que hablarían del caso de Miguel ‘N’, el feminicida que podría ser responsable de más asesinatos de mujeres en la Ciudad de México.

Mariana Ochoa, Gaby Díaz Infante, Rafael Oropeza y Hany Portocarrero Oropeza comenzaron a enlistar los temas de los que hablarían, entonces Ochoa mencionó emocionada: “¿qué creen? El día de hoy les tenemos un temazo. Y es que la semana pasada seguramente escucharon acerca de un nuevo caso de un asesino serial en la Ciudad de México. Un químico fármaco biólogo de nombre Miguel ‘N’. Por eso nos vino a la mente la pregunta, ¿qué pasa en la cabeza de un descuartizador de este tipo?”.

Enseguida la ex integrante de la agrupación OV7 anunció el cumpleaños de Gaby y todos comenzaron a cantar ‘Happy Birthday’ y a bailar.

En redes sociales varios usuarios expresaron su malestar con esa forma de tocar el tema: “todo lo que sucede en este vídeo está mal: Ya ni digamos empatía, sino conciencia, ni un ápice. El tono, la sonrisa, el color con que se presenta el tema como si fuera cualquiera cosa y de pronto a su abrupta celebración”, “qué horrible esto. Se nota que les pasan el guion y ni siquiera se cuestionan si están de acuerdo con compartir esa información y cómo”, “no puedes hablar de ese tema con una sonrisa en los labios como si presentaras al gran personaje”, “el dolor de las familias por perder a sus hijas con feminicidios y violaciones no le importan a nadie si no es para entretener. Y luego dicen que no existe la glorificación de la violencia y de la existencia de feminicidas seriales”.

En 2021 ONU Mujeres en la Iniciativa Spotlight, una alianza entre la ONU y la Unión Europea, en articulación con el Gobierno de México, publicaron 'Un manual urgente para la cobertura de violencia contra las mujeres y feminicidios en México' en donde explican cómo hacer una correcta cobertura sobre los casos de violencia contra las mujeres y las niñas.

En él mencionan que en los medios mexicanos: “está más que normalizado el revictimizar, criminalizar y sexualizar a las mujeres; es decir, donde la vieja tradición de la nota roja persiste y es fomentada, pese a que perjudica a las víctimas, sus familias y a la sociedad en general”.

Señalan que una de las razones por la cuales lo hacen es para tener una audiencia captiva y ávida de más información: “los medios de comunicación lo saben y es por eso que su cobertura intenta dar hasta el más mínimo dato: nombres de víctimas, familiares, direcciones con número de casa, fotos de las personas involucradas, del lugar de los hechos y testimonios de allegados”.

En el caso de las coberturas de los llamados asesinos seriales, indican: “uno de los principales problemas al dar tanta información sobre quienes violentan es que los feminicidios y los abusos sexuales se vuelven un espectáculo, una mercancía valiosa, por lo general salpicada de morbo; y los asesinos se tornan en criminales famosos, figuras de culto, ‘genios astutos’ cuyas razones y modos para violentar mujeres obtienen mayor foco”.

Se deja en segundo plano a las mujeres y niñas asesinadas, y el seguimiento a la actuación de las autoridades para frenar la violencia, así como el análisis de agresiones estructurales en la sociedad. Es decir, se tiende a culpabilizar de una violencia desmedida, a uno o varios personajes criminales, y no se atiende la raíz del problema. En cuanto pasa el episodio del ‘asesino serial’, la problemática queda en el olvido”, asegura el manual.

Finalmente, indican que: “parte del problema de realzar la figura de este tipo de personajes y mitificarlos (los cuales se vuelven materia prima de libros, series, telenovelas, películas u obras de teatro) puede ser el de alimentar los ciclos de violencia”.